martes, 23 de septiembre de 2008

nanas de la cebolla


Al octavo mes ríes
con cinco azahares.
Con cinco diminutas
ferocidades.
Con cinco dientes
como cinco jazmines
adolescentes.

Frontera de los besos
serán mañana,
cuando en la dentadura
sientas un arma.
Sientas un fuego
correr dientes abajo
buscando el centro.

Nanas de la cebolla
Miguel Hernández

2 comentarios:

editorial dijo...

Esta canción le cantaba yo a mis hijos para dormir, y quedaban secos en la cama. Se las recomiendo.
Duermen como nunca!!!

editorial dijo...

Ahora no hay quien los haga ir a dormir. Pero no me importa, me duermo yo y que ellos hagan lo que quieran, por ahora siempre están en casa.